GPS Senderismo Familiar Costa del Sol: mayo 2012

III Fiesta nocturna en la cumbre del Torrecilla

III Fiesta nocturna en la cumbre más alta de la Sierra de las Nieves

Una vez más, como en años anteriores, unos buenos y alegres montañeros se escaparon de la crisis de la civilización por unas horas para vivir en la Sierra de las Nieves, en su cumbre más elevada, la del Torrecilla, una noche mágica, divertida e inolvidable.

En dos grupos, comenzaron a caminar desde el área Recreativa de Quejigales, disfrutando la tarde y de las formas y colorido de la Cañada del Cuerno.

En el nevero de Tolox, con las últimas luces del día, se agruparon. Todos juntos siguieron caminando hacia la Fuente de San Roque, en donde llenaron sus cantimploras de agua fresca, benditamente limpia.

Tan solo les quedaba la última rampa para acceder a la cumbre del Torrecilla. Poco a poco, dando un paso detrás de otro, parando para respirar y suavizar el ritmo del agitado corazón las veces que les hicieron falta y sobre todo, para contemplar los enormes trasatlánticos varados en el Valle del Genal.

Sobre las dos de la madrugada llegaron a la cumbre y en una de sus laderas montaron el campamento, la mesa para la cena y la barra para las bebidas preparadas para la fiesta que celebraron justo después y que duró hasta las seis de la mañana escuchando las melodías de “Siniestro Total”, justo cuando el Sol se despertaba por el Este.

Con las caricias del Sol, uno detrás de otro, el grupo se fue despertando. Tocaba recoger, con cierta tristeza por dejar atrás tanta alegría derramada la noche anterior, fotografiarse en la cumbre y regresar a las penurias del ladrillo y del asfalto hasta que llegara el día en que tocase celebrar la IV Fiesta nocturna en la cumbre del Torrecilla, ¡que la Providencia nos permita disfrutarla!.

El bar

El campamento

El Sol despertando mientras la mayoría del grupo seguía durmiendo

Cumbre del Torrecilla

Foto del grupo en la cumbre del Torrecilla

Todas las fotos de Manoli Ferrer

Todas las fotos de Diego Martín

I Fiesta nocturna en la cumbre del Torrecilla

II Fiesta nocturna en la cumbre del Torrecilla

Etiquetas: Sierra de las Nieves, Torrecilla

Fin de semana previo a la ascensión nocturna al Torrecilla

El Chorro

El pasado sábado nos fuimos al Chorro de entrenamiento para la ascensión y pernocta en el Torrecilla prevista para el próximo viernes. Pensábamos recorrer la Sierra de Almorchón por la mañana y subir al Huma por la tarde aprovechando los frescores del atardecer.

No pudo ser, el cielo se alió en nuestra contra y nos envió agua a mansalva, no tuvimos más remedio que desistir y conformarnos con un pequeño paseo por los alrededores del pantano de Guadalhorce y entrenar duramente para la estancia en la cumbre del Torrecilla en el Restaurante El Kiosko, con sopas perotas y mucho pacharán.

Entre copa y copa de pacharán nos enteramos de que otros Caminantes también se estaban entrenando para lo mismo a base de gin tonic y ron.

En fin, que casi todos estamos entrenados y preparados para lo que se presente en la cumbre del Torrecilla, pero, me pregunto, ¿cómo vamos a subir?

Pantano del Guadalhorce

Nivel alcanzado por el agua en años anteriores

Nos topamos con un complejo abandonado

Y estas barcas, catamaranes, también en estado de abandono

Monte San Antón

El domingo nuestros pasos nos llevaron al Monte San Antón de Málaga. También nos calló agua. Está visto que vamos a tener que subir al Torrecilla en deplorables condiciones físicas.

Se veía llover en Málaga

Cortinas de agua se acercaban al Monte San Antón

Cortijo Peñón de Ronda - Cueva del Agua

Puerto Saucillo - Puerto Bellina - Cortijo Peñón de Ronda – Cueva del Agua - Puerto Saucillo

Con más calor del que estamos acostumbrados a soportar por estas fechas, desde Puerto Saucillo, iniciamos la marcha bajo el frescor sombrío de la inmensa arboleda de pinsapos y cedros que crecen por la Sierra del Pinar.

Pasamos por Puerto Bellina, dejamos a la izquierda la vereda que se dirige al Puerto de los Hornillos y justo a tiempo para comer llegamos al desvencijado Cortijo del Peñón de Ronda, en cuya única habitación todavía habitable, al frescor de sus gruesas paredes y alrededor de una apolillada mesa de madera, disfrutamos de una buena comida regada con buenos vinos y una animada conversación en donde se habló de todo tipo de enredos, tanto mundanos como divinos.

Regresamos, con el sol pegando fuerte en nuestros cogotes, por la Cueva del Agua, en donde, por fortuna, un chorrillo de agua fresca mitigó el calor que arrastrábamos en la subida desde el Cortijo del Peñón de Ronda.

Una cerveza fresca en Yunquera nos sirvió de despedida hasta otro día en el que podamos echarnos al hombro el zurrón de montaña, saco de dormir incluido.

Fotos de Mianorca: